Yo

jueves, 14 de abril de 2011

Carta a un suicida

¿Valoras tu vida? ¿La valoras lo suficiente como para aprovecharla día a día? Nadie te pide que seas feliz. Solo que aproveches la oportunidad que tienes de vivir. Emociones varias vienen a tí. Pensamientos pelean por surgir. Ilusiones que te invaden sin apenas explicación darte.
Cada momento, cada situación. Un cabreo, una discusión, una sonrisa, una caricia, una mirada, una callada, un polvo, una masturbación, un sentimiento de frescor, una ligera brisa, el calentar del sol, un aroma de una flor, una degustación, el sentido a unas palabras, unos acordes de una guitarra, un susurro de una voz, un afán de ser amada, ciertas cosquillas que sientes en tu barriga. Tantas cosas que exprimir. Que sentir.
Cállate la puta boca si no quieres estar aquí. O vete por la puerta de atrás si no tienes cojones de continuar. Claro que jode la vida, como me jode a mí, como jode a tu vecina, o a la puta de la esquina. ¿Y? ¿Vas a estar lamentándote toda tu vida? ¿O se la vas a joder a los demás con tantas penas que contar..?
Espavila. ¡Reacciona! Valora la oportunidad que tienes de vivir tu vida sin más. A otros se la robaron sin ni siquiera preguntar. Si tantas ganas tienes de marchar, tírate de un séptimo piso y ya verás...
Pero no deprimas con tu malestar, cada cuál tiene en lo que pensar. Algo que decir, algo que gritar. Sensación de dolor. Sensación de desilusión. ¿Y qué? De todo se tiene que aprender.. Piensa en lo vivido y en lo que te vendrá después. Aprovecha el momento y déjate ya de lamentos. Está claro que tienes que sentir, y en todos los estados debatir. Quédate con lo mejor de cada estación. El viaje al final recordarás con emoción. Emoción de una vida vivida y exprimida al 100%. No desperdicies tu vida con las cosas del ayer. Hazme un favor y escucha tu corazón. Nada hay tan terrible de lo que no nos podamos reponer.. 
Si aún así no te convenzo, tírate al tren que es un santiamén.

5 comentarios:

  1. jjjajajaj esto me lo digo a mí misma, y de repente...se me olvida y otras veces no-!

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  2. Jajjaja creo que aveces lo olvidamos todos, yo me incluyo.. Pero de ahi a desprender pena por los poros de tu piel.. Para mi irritabilidad.. ;)

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  3. hum, yo creo que para dar el salto hacen falta mucho más cojones que para permanecer aquí comiendo mierda. Especialmente si no crees en nada y, además, tienes la certeza de que tras ese salto no hay NADA. Imagínatelo. Nada. Es imposible de procesar porque estamos programados para vivir rodeados de un montón de cosas. No podemos concebir la ausencia de la inexistencia, en fin.
    Lo dicho, que un respeto para los amigos suididas, pues ellos tienen más cojones que nadie.
    Un beso :P

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  4. Sí, de eso no hay duda alguna..a lo que me refería y no me proporciona pena ninguna són los que carecen de cojones para hacerlo y mientras se lamentan de su pobre vida (ausencia de motivos graves seguro, ya que el que tiene de verdad se tira sin más..) y nos pegan el rollo a los que estamos aquí intentando sacar provecho de algo existencial llamado supervivencia.
    Un abrazo

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  5. Ah, bueno, es que siempre ha habido llorones. Pero esos jamás serán suicidas reales, je

    están bien los abrazos. Dan calor bueno.

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