Yo

jueves, 14 de abril de 2011

Locura

Hasta ahora lo tenía controlado. Mi mente debatía entre ideas, emociones y sensaciones, y de vez en cuando, asomaba un pensamiento oscuro que aveces dislumbraba un único enfoque que me llevaba a una locura determinada de importante deseo sin poder hacer apenas nada. Sin poder remediarlo, en ello me encontraba.
Mi sangre alterada. Mis funciones adormiladas y yo mimsa caía en la cuenta de que ya estaba ganada. Maldita sea. Acorralada, por un único pensamiento de sed pronunciada. Por un deseo enormemente descontrolado que mi vida marcaba. Bendito deseo.

No puedo hacerle frente. Mi deseo es cada vez mayor y me puede el hambre de no tenerte. Irremediablemente siento dolor de buscarte y no encontrarte. Me invade una deseperación que se agraba sin medida, sin control, pura adrenalina que acelera mi corazón cada vez que mi mente invade. Desesperante para mí ésta emoción, que hace que pierda el norte sin razón y necesite masajearme. Necesidad pura y dura.

Necesidad de que estés aquí, de que asistas mi amrgura. Ésta falta de contacto, ésta falta de arrebatos. Arrebatos de chupar tu sangre y comerte a bocados. Arrancarte la piel a cachos. Devorarte a destajo.
Acabar contigo ahora y dejarte para otro rato. Degustación de mi devoción. Me encanta devorarte.

2 comentarios:

Datos personales