Hermano

Te sentí aún antes de nacer. Si afinaba bien el oído podía oír tus latidos. Tremenda ilusión sentía esperando que llegase el día.. Algo me decía que ibas a ser lo más grande de mi vida. Y así fue. Una inhalación de aire fresco a mi ser. La única razón, durante mucho tiempo, por la cuál amanecer. Inseparables. Adjetivo que caracteriza la relación vivida entre nosotros dos. Vínculo extremadamente estrecho que en muchas ocasiones me salvó del desespero. Gracias a Dios. A Dios por expresión popular, no por fe. Incredulidad. Simplemente agradecer, que llegaras a mi vida. Demasiadas veces dependiste de mí, aún siendo yo una niña. Pero más que yo cuidarte a tí, sentía que tú cuidabas de mí. De mi alma frágil que fuerte se hacía por la responsabilidad que tenía. Ésa ilusión día a día de que me sonsacaras una sonrisa que me llenaras de alegría y de ganas de vivir. Por ello lo merecía todo. El soportar.
Conmigo comías, conmigo reías, conmigo dormías.. con nadie más. A pataletas te arrancabas si a tu lado yo no estaba. Sé que muchas cosas no recuerdas..yo por el contrario no he olvidado un solo momento pasado el tiempo. Quizá por el echo de haberme salvado. De darme fuerzas para seguir aguantando.
El día que nos separaron..no se me olvidará jamás..me pedías llorando que no marchara. Tus lágrimas llevaron a las mías, no sé quién lloró más. Emoción de desesperación. De agonía por la separación. Separación de diez años. Diez años de mi vida, de tu vida, de dolor. No ha pasado un solo día que no recordara tu rostro, tus manos, tus tonterías, tu olor. No perdí la esperanza de que algún día sintieras ésa necesidad que a mí me recorría de saber de tí a cada momento del día.
Diez años tuvieron que pasar, para que te dajaran pensar por tí mismo sin tenerte que abasallar. Sin prohibirte ni pensar. Pensar que yo estaba en algun lugar del mundo sin poderte olvidar. Curándome de heridas que hoy en día sangran, y creo,no lo dejarán de hacer jamás.
Lo único bueno, tú. Tú, hermano, que regalaste equilibrio a mi vida una vez más. Que al encontrarte sentí perder esa necesidad. De tí. Te tenía otra vez aquí. A mi lado. Gracias por haberme ayudado. Sólo te quiero decir..eres lo único en la vida que me ha importado. Y lo que me ha servido de impulso para sobrevivir. Aún pensando en tí, recorren lágrimas mis mejillas por lo que me haces sentir. Te adoro.
Nunca más. Nadie nos va a volver a separar, Ni un día, de nuestras vidas dejaremos pasar sin saber uno del otro, sin reir, sin soñar. Sabes que estaré aquí. Pendiente de tí. Como siempre.