
Fracción de segundo frente a mí. Bloqueada. Pues mi pulso aceleró en exceso. Húmeda. Desorientada. Sus ojos clavaron en mi pecho como marca en hierro forjada. Su boca recorrió mi piel y sus manos tornaron mi cuerpo conociendo cada recoveco. Un latir. Un sentir. Una sinfonía compleja al entendimiento.
"Para siempre" ... concebí.
Alcantarillas lloran hoy mi pérdida. La lluvia borró el camino que dejaron mis huellas. Pues enfoqué con otra luz las noches en vela, ahora recurro a tus besos. A tu sed eterna. A la que consigue paliar la mía en infinita esencia.