Doctor

Siento mis latidos y los tuyos intentar ponerse deacuerdo. Cronómetros que parecen aproximarse al fin, para dar lugar a una explosión. Bomba de relojería que tenía que estallar alguno de éstos días. El sudor recorre mi cuerpo. Bendito sudor. Me encanta sentirme pegada a tí. Puedes notar en mis besos deseo. Ganas de tí. Deseo de desgarro al besarnos. Delirio de almas en satisfacción. En mis ojos, vicio, ternura, cariño, locura..pelos de punta. Se eriza mi piel cada vez que entras en mí, el vaivén de tu cintura golpeando contra mí. Que puto deseo el que me logras hacer sentir. Adoro tu cuerpo encima de mí. Adoro tus ganas, tu sed saciada. Mi alma impregnada de tí. Que ganas tenía, de poderte tener así. Mirarte a los ojos, evasión total. Tus labios besan mi cuello, puedo morir en paz. Siente mi cuerpo apretar, nota mi ser deborándote otra vez. No pares. No disminuyas el ritmo cardíaco del cuál necesito para sobrevivir. Como un gotero en un enfermo que necesita autoestima en forma de morfina. Así necesito yo de tí. Mi morfina en tu injección. Injecciones de placer sin control. Bienvenida morfina a mi vida. Bienvenido doctor. Hazme un favor y quédate aquí. Quédate eternamente, porque una vez provado, no sé si voy a poder perderte.