Yo

viernes, 9 de septiembre de 2011

Cambia

En la transición de los cambios no somos realmente conscientes de la repercusión que pueden llegar a tener en nuestro día a día, es más tarde cuando entras en estado de shock por ser capaz, entonces, de valorar realmente el movimiento que se ha ocasionado en tu vida.
Consciente o inconscientemente realizado dicho cambio, o cambios, no somos capaces de imaginar, ni por un momento, las consecuencias, hablando de emociones y sentimientos, que éstos nos pueden acarrear. Ya sean positivos o negativos. Por ello quizás mucha gente tenga miedo a los cambios, quizás por ello mucha gente se quede estancada en un "momento marmota" de su vida, soñando algo que nunca se atreverá a realizar. Quizás por eso para otros muchos haga emocionante ésta vida, nos haga sentir un subidón de adrenalina cada vez que nuestra "guía" pega un giro de 180º o de hasta 360º... ¿Quién lo diría? Pregunta obligada mentalmente que realizamos posteriormente al sufrir un cambio o abrirse un nuevo camino en el sendero de la incógnita atraída.
Esa sensación de vertiginosidad que se crea en tu estómago asfixiado por la emoción de desconocer los posteriores sentimientos encontrados o los que podamos llegar a conocer... Algunos somos adictos a los cambios. No podemos permanecer subyugados a ninguna emoción permanente en todo caso. Por ello posiblemente seamos incomprendidos mayormente. Una pena, para el que no deja abrir su mente y piense que los que estamos perdidos somos nosotros cuando son ellos, realmente.

Circunstancias de una vida...

Datos personales